domingo, 25 de noviembre de 2012

¿Sensualismo en la adoración?

Estamos rodeados de tantas formas extravagantes de "adoración" fomentadas por las iglesias modernas, no se deja de escuchar de "sentir algo en la adoración", esta es la tendencia en cualquier persona que piensa en adorar a Dios en el mundo religioso, pero que podemos decir sobre esto, ¿es esto acaso verdaderamente adoración?, ¿acaso la adoración debe estar basada en las sensaciones o sentimientos humanos?.

¿Que es el sensualismo?
El diccionario de la Real Academia Española lo define así:
Perteneciente o relativo a las sensaciones de los sentidos. || 2. Se dice de los gustos y deleites de los sentidos, de las cosas que los incitan o satisfacen y de las personas aficionadas a ellos.|| 3. Perteneciente o relativo al deseo sexual.

Como lo podemos ver, el sensualismo es lo que tiene que ver con las sensaciones, o más bien a sentir algo, incluso se refiere a la incitación a sentir, y hasta se refiere a las sensaciones sexuales o que incitan al deseo sexual.

Hoy día, en las iglesias modernas se habla mucho de sentir el Espíritu Santo, o de Sentir a Dios, muchos dicen hoy día, que debemos sentir a Dios o al Espíritu Santo cuando adoramos, algunos hasta se atreven a decir que si alguno no siente nada cuando adora es porque no está bien con Dios o que a Dios no le agrada su forma de adorar.
Lo cierto es que cada día, son más y más las personas que buscan sentir algo en la iglesia, ya sea euforia o adrenalina o relajación o como ellos le llaman: ¡un calor! o una paz, o un temblor de cuerpo o estremecimiento, otros dicen que sienten a Dios cuando saltan, gritan, lloran, sudan, aplauden etc. y que si no hacen esto no sienten a Dios en su adoración.
A estas personas les resulta ridículo y absurdo estar simplemente sentado o parado solo cantando con su propia voz, otros cierran los ojos porque dicen que así es como pueden sentir a Dios, todas estas cosas son nuevos inventos de hace unos 50 años si mucho, y que en el primer siglo al inicio de la iglesia ni se conocían, todo porque las personas buscan "sentir" algo.

Lo más triste es que no faltan entre nosotros quienes dicen esto (consiente o inconsientemente) influenciados por estos grupos, y que fomentan el sensualismo en la adoración, ellos ya no solamente hablan de cantar con el corazón sino de sentir algo cada vez que adoramos, para esto muchos han introducido a la iglesia formas que imitan todo el sensualismo de las iglesias modernas, ellos preocupados y desesperados por sentir también algo parecido a los que los religiosos dicen, imitan sus cantos, su ambiente, sus formas, cerrando los ojos para sentir algo, tal vez para sentir a Dios, otros incluso ya han introducido aplausos para sentir algo, otros "oran-cantando-orando" para sentir a Dios, otros lloran, otros incluso ya se han atrevido a introducir instrumentos musicales que los ayuden a "sentir a Dios", lo cierto es que ya han olvidado que la adoración debe ser en "espíritu" pero también en "verdad" no solo conforme al corazón del hombre, no solo conforme a sus sentimientos o sus sensaciones. ¿porqué es necesario mantener este equilibrio? porque al no tomar en cuenta estas tres partes: espíritu, verdad, corazón, la adoración resultaría incompleta o inválida para Dios.

Debemos entender que muchas veces no vamos a sentir nada, ni calor ni frio, ni "sentir" a Dios cuando adoramos, pero podemos estar seguros que Dios nos escucha y recibe si lo estamos haciendo conforme a sus principios Bíblicos.

El sensualismo está queriendo entrar poco a poco a la iglesia ¿cómo? influenciando a hermanos por medio de canales evangélicos, por transmisiones de cultos avivados, por predicas de predicadores que atacan una adoración que no incita a las sensaciones, etc. o seduciendo a hermanos atrayendolos y convenciendoles poco a poco a cambiar encubiertamente la adoración.

Las consecuencias han sido incluso desastrosas, pues ellos, al comenzar a "modernizar" la adoración ya no toman en cuenta los textos, ponen argumentos para desacreditar la forma de adoración, y no faltan los que se ponen a buscar en el griego las palabras de los textos para encontrar algo que les de licencia para cambiar la adoración (ignorando que esto ya muchos lo han hecho antes y no han encontrado nada nuevo) es entonces que salen situaciones fuertes en las iglesias, y hasta resultan en divisiones o en iglesias que pierden su identidad para apostatar convirtiéndose en una secta más.

Judas en uno de sus pocos mensajes y amonestaciones que hace en su carta dice:
  Estos son los que causan divisiones;  los sensuales,  que no tienen al Espíritu. Judas 1:19

Si bien este texto contextualmente se refiere a personas que se dejan llevar por sus pasiones y deseos carnales, no obstante también se refiere a incitar las sensaciones de los sentidos, es claro que el tema principal no es la adoración, sin embargo, podemos aplicar esto de incitar las sensaciones cuando alguien en la adoración quiere que se haga algo más allá de lo Escrito con tal de sentir algo, ¡estemos alertas!
Es cierto que en nuestro canto debemos mostrar y experimentar alegría, solemnidad, paz etc. pero  tengamos cuidado de no caer y dejarnos llevar por el sensacionalismo y sensualismo hasta buscar que en la adoración nuestras sensaciones sean la base de nuestro culto a Dios.

Recordemos: Engañoso es el corazón más que todas las cosas,  y perverso;   ¿quién lo conocerá?
                                                            Jeremías 17:9

Bayron Alonzo.
dedicadosalcanto.blogspot.com

jueves, 18 de octubre de 2012

Negativismo en la iglesia en cuanto al canto

Conozco muchas congregaciones de la iglesia del Señor que en su mente tienen una mentalidad generalizada en cuanto al canto, algunos miembros se muestran desinteresados, otros se muestran indiferentes y en algunos casos hasta se muestran antipáticos.

Algunas de las manifestaciones de esta actitud en la iglesia se deja ver a lo lejos, las muestras de esta actitud en algunos miembros de la iglesia (a veces una buena mayoría) son muy notables, si no es con palabras es con actitudes, semblantes, gestos y hasta acciones claras, entre estas podemos encontrar:

Actitudes:
1. Hermanos que llegan tarde al culto, pero lo suficientemente a tiempo para escuchar el sermón. Con
   esto muestran que para ellos no es importante el acto de cantar a Dios.
2. Hermanos que sabiendo leer no llevan su himnario cuando van al culto.
3. Hermanos que en el momento de cantar se ponen a ver su reloj, su Biblia y hasta el celular.
4. Hermanos que en el momento de cantar, se ponen a dormir.
5. Hermanos que en el momento de cantar, mientras todos los demás cantan, ellos ni mueven la boca.
6. Lo peor es cuando el director de canto no se sabe bien las entonaciones y/o no pronuncia bien las
    palabras, no está con el ánimo adecuado, o cuando dice: si a mí no me sale ustedes sigan bien, etc.
7. Cuando solo se canta uno o dos himnos antes de la prédica y dos estrofas de algún otro himno después.

Frases famosas:
1. "Por cuestión de tiempo vamos a cantar solo un himno".
2. ¡No importa como cantamos, Dios lo que ve es la intención!.
3. ¡Dios no quiere cantidad (de cantos), Dios quiere calidad! ¿?
4. ¡Si no le sale bien el canto, no se preocupe, cante como pueda!.
5. ¡No le cantamos a los hombres para que nos digan si les gusta o no el canto, le cantamos a Dios!
6. ¡Si canta bien o mal no importa, total es para Dios!
7. No hay necesidad de cantar varios himnos, con dos o tres es suficiente.
8. Algunos miembros dicen: ¡Ya son muchos himnos!.

Creencias generales:
- La célebre frase: "Y ahora viene lo más importante, la Palabra de Dios" (tema que veremos en otra oportunidad) Nos ha hecho descuidar el canto a Dios.

- Otos dicen: "Yo prefiero hacer algo más importante que ponerme solo a cantar", Esta frase es dicha por algunos hermanos cuando se les dice que deberían dedicar un tiempo para mejorar su canto, ellos demuestran que el canto no tiene ninguna importancia en sus vidas.

-"El canto No es mi don"   Eso dicen algunos hermanos, usando esto como excusa para no esforzarse para cantar mejor, pero recuerdo lo que algún predicador dijo en cierta ocasión: "quien les dijo que el canto es un don" este hermano argumentó acertadamente que en ningún texto que habla de los dones espirituales se menciona el canto, yo agrego que el canto no es un don sino un deber del cristiano para con Dios.

Gestos:
Cara seria cuando el director va con el tercer o cuarto himno, ¡imaginémoslo después del quinto himno!.
Rostros reflejando cansancio por cantar mucho.
Inquietud manifestada en el semblante.
Mirar el reloj a cada rato.

¿Le son familiares estas cosas?...

Podríamos seguir con esta inmensa lista, pero mi propósito no es poner en manifiesto todas las formas de mostrar nuestra actitud negativa ante el canto a Dios, sino más bien, despertar conciencia de lo que estamos haciendo, quizá no nos hemos dado cuenta de la realidad, por eso debemos recordar que al cantar no lo estamos dedicando a hombre alguno, sino a Dios, el que nos salvo, que nos limpió, que nos rescató de la perdición en la que estábamos y nos dio una nueva identidad,
¿Cree usted que Dios se merece todo ese negativismo en cuanto al canto que le dedicamos?
¿estamos siendo conscientes de lo que Dios pide de nosotros?
¿Estamos cumpliendo nuestra función y propósito para el cual hemos sido creados?


Efesios 1:11-12  En él asimismo tuvimos herencia,  habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad,  a fin de que seamos para alabanza de su gloria,  nosotros los que primeramente esperábamos en Cristo.

Bayron Alonzo.
dedicadosalcanto.blogspot.com